El pozo 'San Isidro' podría reabrir en un plazo de entre dos y cuatro meses

ICAL & R.A.R.
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Los propietarios, los alcaldes de Velilla del Río Carrión y Guardo y el delegado territorial de la Junta estudiaron la documentación que se precisa para agilizar «cuanto antes» los trámites

• Los regidores de la comarca norteña mostraron su apoyo a los gerentes de ‘Carbones Alto Carrión’ para que la minería de interior vuelva a ser una realidad en nuestra provincia.

El pozo San Isidro y María, ubicado en Velilla del Río Carrión, podría reanudar su actividad con una plantilla de doce o quince trabajadores en un periodo de tiempo que oscilaría entre los dos y los cuatro meses tras ser adquirida hace mes y medio por la empresa Carbones Alto Carrión.

Así lo anunció ayer el delegado territorial de la Junta, Luis Domingo González, que se reunió con los nuevos propietarios de la explotación y los alcaldes de Velilla, Gonzalo Pérez, y Guardo, Juan Jesús Blanco, para agilizar lo máximo posible los trámites.

González concretó que se precisará un mínimo de dos meses y un máximo de cuatro para cumplir los requisitos necesarios para reabrir con todas las garantías la mina, que aunque cerró en marzo de 2014 dejó de funcionar en 2013 debido a las deudas acumuladas con la Seguridad Social y Hacienda.

En declaraciones a los periodistas, el delegado de la Junta mostró su absoluto apoyo a la nueva propietaria de los derechos de explotación de San Isidro y María en línea con la política de compromiso del Ejecutivo Regional a un sector, el del carbón, considerado estratégico.

«Vamos a hacer lo que haya que hacer en un tiempo récord en respuesta a unos emprendedores que han tenido la valentía de abrir una explotación y por ello debemos ser corresponsables y cómplices», alegó González.

Además, aclaró que la documentación necesaria es doble. Por un lado, la que corresponde a Industria referida al plan de actuación y, por otro, a Medio Ambiente que dependerá del ámbito la actividad. Si se limita a la minería requería únicamente licencia pero si abarca también las escombreras se precisaría además declaración ambiental.

Sobre si los anteriores dueños estuvieron operando sin la necesaria licencia ambiental -lo que ahora podría suponer un lastre para la rápida apertura de la mina- el delegado recordó que fue solicitada en 2010, pero que la correspondiente comisión consideró necesaria una declaración que no llegó a concederse.

APOYO MUNICIPAL. Por su parte, los dos regidores presentes en el encuentro evidenciaron una vez más su «total apoyo a la explotación para que la minería de interior vuelva a ser una realidad en nuestra provincia».

Asimismo, precisaron que la creación de nuevos puestos de trabajo «es una buena noticia para la comarca, que no está pasando precisamente por su mejor momento».