Intensa jornada deportiva la que vivían ayer domingo las cercanas localidades palentinas de Cervatos de la Cueza y Carrión de los Condes, sedes de las finales de los Torneos Provinciales 2013, organizados un año más por la Fundación Provincial de Deportes de la Diputación de Palencia.
Por un lado, el coqueto Frontón Municipal cubierto de Cervatos de la Cueza (Polideportivo Isaac Viciosa) acogía (con un buen número de aficionados siguiendo el bonito choque) desde las 11 de la mañana la final de frontenis, disputada entre Cisneros A y Villamuriel A. Toño llevaba el peso del encuentro desde atrás y Jesu por delante barría las pelotas que llegaban a su zona. Llevaron la iniciativa desde el comienzo ante unos luchadores jugadores cerrateños que, poco a poco, fueron pagando el esfuerzo en un interminable intercambio de golpes hasta el definitivo 30-10 (17-6 y 23-9 eran los marcadores parciales en los tiempos de descanso). El Torneo Provincial de frontenis ya viajó a Cisneros en 2012 y 2009.
La otra final que acogía el frontón de Cervatos era la de pelota a mano, que medía a Villarramiel A y Grijota. Por primera vez en cuatro años no estaba entre los dos primeros el representante de Aguilar de Campoo, vigente campeón (tres triunfos consecutivos y cuatro de los cinco campeonato disptados hasta este año).
CARRIÓN. Más deportes de raqueta en la otra sede de la jornada final, donde Paredes de Nava llegaba con más representantes que nadie (ya partió en el inicio de este Torneo Provincial con seis equipos de pádel, de los 36 participantes palentinos; y con dos de los siete inscritos en la liguilla de tenis).
- Foto: eva garrido Y ganaba en pádel (con su equipo F, al Guardo C, uno de cuyos componentes acabó lesionado), donde la final femenina fue un Cubillas de Cerrato-Herrera de Valdecañas. Pero en tenis su equipo A era derrotado por el conjunto de Herrera de Pisuerga tras haber cedido en los dos primeros duelos (un individual y el de dobles), dejando sin trascendencia el tercero de los envites de la eliminatoria final.
El duelo que cerraba la mañana era el de baloncesto, en el Polideportivo Municipal carrionés, con buen aspecto en las gradas, y donde vencían los locales en un choque intenso y disputado ante el Frómista. Ya dominaban al descanso (33-26, marcando las distancias a base de triples) y acabaron superando a su rival por 68-56. Los carrioneses habían apeado en semifinales al Osorno, campeón de los dos últimos años.
Y por la tarde, la esperada final de fútbol. Un duelo muy equilibrado en el que Becerril y Paredes compitieron hasta el último instante. Los paredeños se quedaron con diez en un primer tiempo que acabó con el empate inicial. Y en el segundo, un tanto de Álvaro desde los 11 metros supuso que el trofeo se marchara con el Paredes (que ya ganó en 2011 y sucede en el palmarés al Villaumbrales).