El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, inauguró ayer oficialmente la nueva planta de Galletas Gullón, una nave de 55.000 metros cuadrados construida al lado de la que abrieron en 2002, que cuenta con otros 130.000 metros. Las instalaciones se han convertido poco a poco en la fábrica galletera más grande de Europa y una de las mayores del mundo. La ampliación, bautizada con el nombre de VIDA y con tres líneas de fabricación en marcha, ha costado 64 millones y este año pretenden inyectarle otros 20 millones para seguir ampliándola.
Herrera destacó el valor de la industria agroalimentaria, que con una actividad que representa el once por ciento de la economía autonómica, constituye un motor de desarrollo del medio rural y un factor fundamental para fijar población. «En cierta manera es más importante que la industria automovilística porque hablamos de cerrar una cadena de producción, de un valor añadido que radica en lo más trascendental: en el alma y en el ser de Castilla y León que es el mundo rural», aseguró.
Durante su intervención, que cerró un acto al que asistieron más de 400 personas, el presidente puso como ejemplo Gullón, que el año pasado creó 200 puestos de trabajo entre personas de la comarca de Aguilar y con una media de edad que no supera los 30 años. «Ahora se pueden plantear proyectos personales de futuro en este entorno rural con empleo de calidad y una empresa con proyección», matizó.
También mencionó los más de 130 millones de kilos anuales de trigo y otros 135 millones de azúcar que utiliza en su producción la compañía y de los que más de la mitad proceden de proveedores de Castilla y León con lo que supone de garantía de actividad para los agricultores, informa Ical.
Primer sector. El presidente de la Junta recordó que este sector permite transformar, comercializar y dar mayor valor añadido a las materias primas de Castilla y León. Aludió a que es el primer sector industrial de la Comunidad, con más de 3.000 empresas, 35.000 trabajadores y una facturación de 10.000 millones. Asimismo, su apuesta por la internacionalización se ha visto reflejada en las exportaciones que en 2014 aumentaron un tres por ciento, alcanzando los 1.558 millones.
En este ámbito, el sector de panadería, pastelería o galletería es el segundo después del vino.
Respecto a Gullón, Herrera destacó que se trata de una empresa fundada a finales del siglo XIX, que perdura cinco generaciones después y que se ha convertido en referente nacional e internacional sin dejar de ser la primera galletera familiar de España. No quiso concluir el presidente sin resaltar el compromiso con la tierra y el liderazgo empresarial, la apuesta por la competitividad y la innovación que han llevado a la compañía a situarse líder del mercado.