Trece municipios de la provincia tienen la condición de libres de fracking. Es decir, una mínima parte de las localidades de la provincia ha decidido posicionarse de forma oficial ante esta técnica de extracción de gas, habida cuenta de que 73 están incluidas en las solicitudes de extracción o almacenamiento que se tramitan.
Lo han hecho a resultas de una campaña impulsada a nivel nacional encaminada a crear consciencia entre las autoridades locales «acerca de los enormes impactos que ocasionan el uso de la técnica del fracking sobre la tierra, el agua, las personas y calentamiento global», señalan sus promotores.
Aguilar de Campoo, Astudillo, Barruelo, Brañosera, Cervera, Frómista, Guardo, La Puebla de Valdavia, Magaz, Osorno, Pomar de Valdivia, Salinas de Pisuerga y San Cebrián de Mudá son las localidades que están en el listado de municipios españoles que se oponen a esta técnica.
Uno de los colectivos que más ha movido la campaña es Amigos de la Tierra.
Sostienen que, en contra de lo que piensan las grandes empresas extractivas, «creemos que esos preciados recursos naturales de los que disponemos y cuidamos, deberían ser usados de modo justo y sostenible».
Amigos de la Tierra trabaja en defensa de una reglamentación europea más severa para este tipo de empresas, y rechaza cualquier provisión legal que haga prevaler el interés económico de un empresa o grupo de inversión sobre el de un país o región por encima del marcos democráticamente establecidos por su ciudadanía.
La fractura hidráulica es una técnica que permite acceder al gas y al petróleo no convencional a grandes profundidades.
En la actualidad, según los datos que maneja la Secretaría de Estado de Energía del Ministerio de Industria, existen en la provincia dos permisos de extracción o almacenamiento de hidrocarburos vigentes, Pisuerga y Biguenzo (este segundo compartido con la provincia de Burgos).
El primero abarca casi 43.000 hectáreas en los términos de La Pernía, Cervera, Dehesa de Montejo, Mudá, San Cebrián de Mudá, Salinas de Pisuerga, Aguilar, Barruelo y Brañosera.
El segundo, incluye las provincias de Palencia, Burgos y Cantabria. Los términos municipales palentinos a los que afecta son Aguilar y Pomar de Valdivia. Su extensión es de algo más de 91.000 hectáreas.
Además hay solicitados otros cuatro permisos, denominados Osorno, Guardo, Palencia 1 y Palencia 3.
Por el camino se habrían quedado, de esta forma el Permiso Leni -90.000 hectáreas en las provincias de Palencia y Burgos), Palencia 2 (casi 95.000 hectáreas repartidas entre la provincia de Palencia y la de Burgos) y Palencia 4 (algo más de 96.000 hectáreas en las provincias de Palencia, Burgos, Segovia y Valladolid).
En la provincia de Palencia se podría desarrollar esta técnica extractiva en un amplio listado de localidades formado por Velilla, Guardo, Mantinos, La Pernía, Cervera, Dehesa de Montejo, Mudá, San Cebrián de Mudá, Salinas de Pisuerga, Aguilar, Barruelo, Brañosera, Pomar de Valdivia o Castrejón de la Peña, Roscales de la Peña.
A ellos se suman Congosto de Valdavia, La Puebla de Valdavia, Báscones de Ojeda, Payo de Ojeda, Olmos de Ojeda, Santibáñez de Ecla, Prádanos de Ojeda, La Vid de Ojeda, Collazos de Boedo, Herrera de Pisuerga, Sotobañado, Priorato, Páramo de Boedo, San Cristobal de Boedo, Santa Cruz de Boedo y Espinosa de Villagonzalo.
Bárcena de Campos, Villameriel, Dehesa de los Romanos, San Martín del Monte, Alar, Baltanás, Cobos de Cerrato, Tabanera de Cerrato, Villahán, Herrera de Valdecañas, Palenzuela, Villodrigo y Reinoso de Cerrato son municipios donde la técnica ha puesto sus ojos. Lo mismo que en otras localidades cerrateñas, como Hornillos de Cerrato, Villaviudas, Valle de Cerrato, Villaconancio, Castrillo de Onielo, Cevico de la Torre, Vertavillo, Cevico Navero, Alba de Cerrato o Hérmedes de Cerrato. Más al norte, se incluyen Osorno, Lantadilla, Marcilla de Campos, Itero de la Vega o Frómista.
Cierran el listado Boadilla del Camino o Melgar de Yuso, Támara de Campos, Santoyo, Astudillo, Palacios de Alcor, Villalaco, Cordovilla La Real, Quintana del Puente, Torquemada, Valdeolmillos, Villamediana, Antigüedad, Castrillo de Don Juan y Espinosa de Cerrato.
En el año 2012 Ecologistas en Acción se dirigió a los Ayuntamientos incluidos en algunos de los permisos de investigación que diferentes empresas energéticas han solicitado.
Desarrolló una campaña de información respecto de la fractura hidráulica o que más comúnmente se denomina fracking.
Por ello solicitaba que se presentara una moción adjunta, para que se debatiera, y se declarara el término municipal libre de esa técnica. Entienden los que se oponen al fracking que esta extracción puede provocar graves daños al medio ambiente y la salud.