Castilla y León educa bien. Es una frase que le gusta pronunciar al consejero Juan José Mateos. De hecho la repite todos los cursos. Pero además, esta afirmación la avala nuevamente el informe PISA elaborado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) y que evalúa los conocimientos y destrezas de los alumnos de 15 años en áreas de matemáticas, lectura y ciencia en 65 países y dentro de España a todas las comunidades. La Comunidad volvió a revalidar el sobresaliente de las tres ediciones anteriores y se sitúa en los puestos de cabeza en España, aunque con variaciones en los diferentes escalafones.
En concreto, los alumnos de Castilla y León se sitúan como líderes nacionales en ciencias, pero ha perdido la hegemonía en matemáticas, al verse superado por Navarra; y ha pasado de segundo a tercer puesto en comprensión lectora, con Madrid y también Navarra, por delante.
No obstante, salvo en matemáticas, donde ha pedido cinco puntos de más de 500 sobre los que se evalúa, en el resto de las materias mejora la nota, dos puntos en lectura y tres en ciencias; lo que ocurre que Navarra ha avanzado más.
El consejero de Educación, Juan José Mateos, consideró una mera «anécdota» mirar el escalafón para ver si la Comunidad está primera, segunda o tercera. «Lo importante es que en las tres partes de la evaluación se consiguen datos muy buenos», aseguró.
Mateos insistió en que los resultados son excelentes y la bajada de unos puntos en matemáticas los entiende como si un alumno pasa de un 9,4 en un examen, en otro saca un 9,3 y en otro, un 9,5: «todos son sobresalientes». Si bien insistió en que todo habrá que analizarlo para tratar de mejorar. «Hay que reflexionar sobre las acciones para volver a situarnos en primera posición», dijo.
Más allá de los puntos, Juan José Mateos destacó que Castilla y León es la Comunidad en la que menos diferencia existe entre los resultados de los alumnos de colegios públicos y privados y también donde menor es el impacto de origen social o entre inmigrantes y nativos, lo que a su juicio es motivo de orgullo porque pone de manifiesto la equidad del sistema educativo regional.
El consejero de Educación atribuyó el éxito de los resultados en la evaluación internacional al trabajo de los maestros y los alumnos en las aulas, a la colaboración de las familias y por último también a la planificación de las políticas educativas puestas en marcha desde la Junta. «No son fruto del azar, sino la consecuencia de un trabajo constante, homogéneo, estable y equilibrado a lo largo del tiempo», insistió Mateos.
Elogios del ministerio. No en vano, la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Comendio, destacó ayer en el análisis nacional que los resultados obtenidos por los alumnos de Castilla y León, Navarra y La Rioja en las pruebas de matemáticas, ciencias y lengua «están por encima de lo que les correspondería de acuerdo a su nivel socioeconómico». Insistió además en que estas tres autonomías «rompen esa estadística y se sitúan por encima de lo que les correspondería por su nivel socioeconómico».