La localidad burgalesa de Santa María del Campo recrea desde hace años el paso de Juana la Loca (Juana I de Castilla). Este año, además, inaauguró una escultura homenaje a su figura que firma el palentino Sergio García. Ubicada en la plaza de la Trinidad (al lado de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción), su inauguración reunió a más de 2.000 personas.
La representación teatral recrea la parada que realizó Juana la Loca cuando viajaba hacia Granada para enterrar a su esposo Felipe I. La hija de los Reyes Católicos no se separó ni un momento del féretro y estaba acompañada por una comitiva formada por un gran número de personas entre las que había religiosos, nobles, damas de compañía, soldados y sirvientes diversos a quienes dan vida los vecinos de Santa María del Campo. Según los registros históricos, la reina pasó en esta localidad burgalesa alrededor de un mes y allí mantuvo un encuentro con el cardenal Cisneros cuya investidura coincidió con la llegada de Juana la Loca. En la placa puede leerse: «Homenaje a una gran mujer, a quien la historia le negó la gloria, por amar demasiado. Hija de Reyes, Reina y madre de seis hijos que fueron, dos varones Emperadores y, cuatro mujeres Reinas».
La escultura tiene unas dimensiones de 70 centímetros de alto, 52 de ancho y 40 de fondo. El escultor se muestra satisfecho de la obra, en la que ve sus avances. Así, especifica que se ha atrevido con detalles como las pestañas de los ojos y un mayor trabajo en la mirada, además de las filigranas y relieves de la vestimenta. Califica de «interesante» el encargo, con el que ha disfrutado, y es que cada vez los retratos, una parte importante de su producción, tienen para él menos secretos».